9.28.2007

de verdad gracias

Dice D que cuento cosas cafés y tiene razón como todos mis amigos cuando se quejan de los soldados malditos, de las estatuas con vida y de todos los bodrios malhumorados con que suelo recibirlos las pocas veces que se paran por la casa; sin embargo, ahí se quedan guardan silencio se ponen una mano en la barbilla y al final, sonríen. Por eso, en agradecimiento a esos ánimos infundados, a esos buenos deseos, a todo eso que han hecho por mí, o conmigo, hoy diré cosas de buen color y forjaré sobre una oleada invisible cantos cuyo misterio tocará incluso a sus corazones enfermos de esta era absurda………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………….. era………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………aún………………………………………………………………………………….un día de estos
Lu

9.26.2007

y sigue ahí

Me asombra que pasen los días y siga ahí, como una gota de baba siempre a punto de caer pero ya cumplió 99 semanas y no es que sea inmune al viento a la gravedad o cualquier cosa, imagen que se le atraviese, o que esté en contra de estallar sobre el rostro de los vecinos, el lomo de los gatos o las afluentes que se esconden cada vez más lejos de la ciudad; sólo le gusta estirarse los días azul medio, apenas deja que la toquen las tormentas, sigue ahí para el personaje que incluso podría quererle pero no lo hace porque le angustia su deceso inminente.

9.25.2007

explicarle al vampiro


Hay una orgía de sombras afuera aúllan porque aman y detestan al sol; hay una fotografía de niñas vestidas de rosa que regresan del colegio; hay dos torres que miran al poniente sobre su absurdo; hay calles prohibidas que retuercen al tiempo; están los vivos y los deberes; la pulsión de los encuentros; los cabos sueltos y nuevas refutas para explicarle al vampiro por qué debe abandonar la noche, y no lo hace Hay una orgía de niñas que aman; hay dos torres que regresan; hay fotografías del colegio; hay calles prohibidas que retuercen a los vivos y los cabos detestan al sol; hay sombras de los deberes; los encuentros vestidos de rosa; la pulsión de nuevas refutas para mirar la noche, y el vampiro no lo hace Hay calles que aman al sol; los deberes miran al poniente sobre su absurdo; niñas vestidas de rosa aúllan por las calles prohibidas; hay refutas que retuercen a las torres de sombra; hay una fotografía para explicarle a la noche por qué la detestan los vivos, y el vampiro no lo hace Hay cabos sueltos afuera; están los vivos porque aman; las sombras vestidas de rosa retuercen al vampiro; la pulsión de una orgía para explicarle el colegio; dos niñas aúllan nuevas refutas; encuentros que detestan al sol; hay absurdo que mira una fotografía del poniente; hay tiempo calles los deberes la noche, y no lo hace